NO OS DEJÉIS ENGAÑAR
I. INTRODUCCIÓN
En la última enseñanza hablamos acerca de no dejarnos engañar tanto por satanás, el mundo, y por los falsos maestros, lobos disfrazados de ovejas, hombre amadores de sí mismo y del dinero que solo buscan llenar sus bolsillos enseñando cosas equivocadas, hablamos de la responsabilidad que tenemos de aprender, de que la ignorancia no es una justificación pues Dios ha dispuesto todo conocimiento a través de su palabra para que seamos entendidos de cuál es su voluntad, estudiar la palabra de Dios y obedecerla es amar a Dios.
“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.”
Santiago 1:5 RVR1960
“Si me amáis, guardad mis mandamientos.” S. Juan 14:15 RVR1960
Debemos pedir a Dios sabiduría, aprender sus enseñanzas, leer su palabra y profundizar en ella.
Pero no hablamos de un tercer agente de engaño, uno que es un maestro, quizás es el más peligroso de todos, más que los falsos profetas y satanás.
“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”
Jeremías 17:9 RVR1960
Quizás creímos que lo más engañoso eran los filtros de las redes sociales, pero estábamos equivocados, El corazón del hombre, nuestro corazón es el tercer y último agente que puede engañarnos y llevarnos a la condenación eterna, y dice la palabra es peor que todas las cosas y por ende más peligroso.
Cuando el corazón nos engaña es peor porque creemos que hacemos lo correcto y realmente estamos haciendo lo contrario, o cuando estás convencido de tu actuar y de lo que vas hacer, quiero que leamos algunos ejemplos de cómo nuestro corazón nos engaña.
“Entonces Jesús les dijo: Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, y las ovejas del rebaño serán dispersadas. Pero después que haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea. Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces. Pedro le dijo: Aunque me sea necesario morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.” S. Mateo 26:31-35 RVR1960
Jesús, el hijo de Dios, dice a Pedro, todos ustedes huirán y se escandalizaran de mí, Pedro bien “espiritual” responde a jesús aunque tenga que morir contigo no te dejaré.
“Mas todo esto sucede, para que se cumplan las Escrituras de los profetas. Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron.” S. Mateo 26:56 RVR1960
“Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices. Saliendo él a la puerta, le vio otra, y dijo a los que estaban allí: También este estaba con Jesús el nazareno. Pero él negó otra vez con juramento: No conozco al hombre. Un poco después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre. Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el gallo. Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente.” S. Mateo 26:69-75 RVR1960
Pedro fue engañado por su corazón el cual le decía real hasta la muerte, y fue tal el engaño que cuando fue advertido por Jesús, ignoró su advertencia, y a esto nos lleva el engaño de nuestro corazón, a ignorar las palabras del mismo Jesús, a ignorar lo que enseña la palabra de Dios.
Era el mismo Dios diciéndole a Pedro, y Pedro prácticamente le dice tú te equivocas yo estoy dispuesto a morir si es necesario, hay gente que creyendo hacer lo correcto, o estar bien, ignoran la advertencia, menospreciando la voz de Dios.
Me acuerdo hace unos 17 o 18 años antes de entrar a la universidad le decía a Dios, señor cuando entre a la universidad el primer día voy a decir que soy cristiano y voy a empezar a compartir de ti, entre y fui cristiano de la secreta los primeros semestres, pero yo estaba convencido de que no era así, recuerdo mis oraciones, cuando incorrectamente le decía a Dios, Dios yo nunca te voy a fallar, tan engañado estaba que oraba en contra de los la biblia nos enseña, y así hay muchos hoy día.
Recuerdo lo que me contó alguien que meditaba sobre el día que la fueran a roban, decía no el día que a mi me vengan a robar yo les comparto de cristo, yo me pongo a predicarles, pues ese día llegó y esa mujer cuenta que salió corriendo gritando como loca y hasta dejando tirada una familiar con la que iba, nos engañamos con una facilidad.
Este engaño nos lleva actuar con insensatez, veamos otro ejemplo:
Dios da una orden a Saúl de destruir un enemigo totalmente, Dios le da la orden de no dejar a nadie vivo y esto sucede.
“Y Saúl y el pueblo perdonaron a Agag, y a lo mejor de las ovejas y del ganado mayor, de los animales engordados, de los carneros y de todo lo bueno, y no lo quisieron destruir; mas todo lo que era vil y despreciable destruyeron. Y Saúl respondió a Samuel: Antes bien he obedecido la voz de Jehová, y fui a la misión que Jehová me envió, y he traído a Agag rey de Amalec, y he destruido a los amalecitas.” 1 Samuel 15:9, 20 RVR1960
Saúl menosprecia la orden de Dios producto de creer que hacía algo bueno, que Dios no había tenido en cuenta, es tal el engaño que actúa pensando que hace algo bueno, cuando realmente está haciendo todo lo contrario.
Vemos mucha gente así en la iglesia, muchas veces, me he dado cuenta de que he estado actuando mal por mucho tiempo y en muchas ocasiones, y siempre pensando que estaba haciendo lo correcto.
“Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.”
S. Mateo 7:22-23 RVR1960
Estos hombres llegaron convencidos ante jesús a decir hicimos esto, hicimos aquellos, llegaron convencidos de que hicieron lo correcto, y nunca fue así, su corazón les hizo creer eso.
Ahora bien pareciera que no tuviéramos escapatoria ante el engaño, sufrimos ataques por satanás con el mundo.
“Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;” 1 Pedro 5:8 RVR1960
Sufrimos Ataques de falsos pastores que sólo aman el dinero, y de nuestro propio corazón que nos lleva incluso a menospreciar la voz de Dios, haciéndonos creer que estamos haciendo lo correcto
Pero recordemos que el ser engañados no nos libera de responsabilidad, pues cómo hemos compartido en el acto de ser engañados, hay un acto de nuestra parte como lo es el menosprecio del conocimiento de Dios.
Somos responsable de ser engañados, examínenos cuando satanás intenta engañar a jesús, jesús es llevado por el Espíritu al desierto donde es tentado, y se resaltan tres ofrecimientos, pero quiero que leamos sus respuestas:
“Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” S. Mateo 4:4 RVR1960
“Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.”
S. Mateo 4:7 RVR1960
“Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.” S. Mateo 4:10 RVR1960
En las tres respuestas él nos da la herramienta principal para salir del engaño, escrito está, vemos que Jesús exalta el conocimiento de las escrituras, y no solo conocerla si no creerla.
No veo a Jesús respondiendo, yo creo que tienes un poco de razón, ese famoso Yo creo, muchos han terminado cayendo en la tentación de satanás, hoy satanás se te muestra como ese “amigo” que tiene la solución para tu problema, se te muestra como la manera de tener éxito en este mundo, recordemos que satanás se disfraza de todo lo bueno, cuando no estamos en comunión con Dios somos presa fácil para satanás y caemos en su tentación incluso creyendo que hacemos lo correcto, las palabras de Dios nos enseña:
“Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal;” Proverbios 3:5-7 RVR1960
No te apoyes en tu propia prudencia, No seas sabio en tu propia opinión, esto es grave y muchos hemos sido así y aún somos así, vemos muchas personas que no estudian la palabra y creen saber todo sobre Dios.
Espero que realmente estemos aprendiendo lo peligroso que es apoyarse en nuestra propia prudencia, incluso en nuestras experiencias vividas, debemos tener temor de Dios y realmente buscar de corazón hacer su voluntad, hay algo que todo cristiano debe tener claro, y es que el cristianismo no se basa en ser buena persona, un hijo de Dios no es aquel que es bueno, un hijo de Dios es aquel a quien un dios bueno ha llamado, y entiende que por su gracia es salvo, y que lo más importante es hacer la voluntad de Dios.
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.” S. Mateo 7:21 RVR1960
Una de las creencia más peligrosas es creer que merecemos el cielo por las buenas obras, y muchas veces escuchamos frases como, ay usted se gano el cielo con ese favor que me hizo, todavía muchos creen que el cielo se lo merecen los que hacen buenas obras, son aquellos que dicen pero porque le pasan cosas malas a personas buenas, cuando mi esposa estuvo muy enferma algunos me decían pero porque a Jessica y ella es tan bella persona, tan buena gente, yo decía es que si la conocieran de verdad, jeje, realmente esta manera de pensar nos impide recibir la gracias de Dios, su gracia aquella que nos permite disfrutar de su salvación sin merecerla.
La salvación Nunca se trata de buenas obras, pero sí de buscar hacer la voluntad de Dios, no se trata de que cosas haces para Dios, sino de que hagas la voluntad de Dios, algunos dirán como los hombres del versículo, pero nosotros profetizamos, Sanamos en tu nombre, fuimos a un lado y al otro, no es lo que hagas para él, es que hagas lo que él dice, la pregunta que dia a dia debemos hacernos es: estamos haciendo la voluntad de Dios?
Ahora bien muchos dicen pero cómo hacemos para saber cual es la voluntad de Dios, si fácilmente podemos estar engañados, como hacemos para saber cual es la voluntad de Dios, si satanás nos engaña si los mismos pastores nos engañan con sus malas enseñanzas, si nuestro corazón también nos engaña.
Una de la promesas de Dios para nosotros es que suplirá todo lo que necesitemos para hacer su voluntad:
“Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.” Filipenses 4:19 RVR1960
Y Dios nos ha dado herramientas para que nosotros conozcamos su voluntad, Dios siempre te mostrará cuál es su voluntad, es su promesa, que no sea eso lo que tu quieras hacer es otra cosa, hoy quiero nombrar tres herramientas para conocer la voluntad de Dios.
La palabra de Dios, las escrituras.
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” 2 Timoteo 3:16-17 RVR1960
Recordemos las respuestas de Jesús, siempre respondía escrito está, lo que él conocía de su palabra lo guió hacer la voluntad del padre, se que ya lo he dicho muchas veces y vuelvo y se lo repito no conocerás a Dios y menos su voluntad, si tienes la biblia cerrada en casa, si no lees la biblia no podrás conocer la voluntad de Dios, además leerla con la actitud correcta que es aprender, crecer en conocimiento que transforme mi mente, algunos la leen como un ritual o como leer un libro cualquiera, debemos estar dispuestos a ser transformados.
La iglesia: Les pregunta uno oye y porque no has vuelto a la iglesia?, no yo oro en mi casa igual Dios está en mi corazón, ohhhh que espiritual, solo le falto decir la biblia dice que él está en mi corazón, no necesito ir a la iglesia.
Jesus edifica la iglesia, para perseverar en sus enseñanzas, para que nos edifiquemos unos a otros, para que nos animemos, para que nos exhortemos, quién no le da importancia a congregarse en la iglesia, está literalmente menospreciando el diseño de Dios.
“Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” Hebreos 10:24-25 RVR1960
En esto quiero hacer énfasis, sé que la tecnología a permitido que se lleve el mensaje de forma masiva, se que bien usada es útil, pero congregarse en la iglesia no es ver la predica de manera virtual cada 8 días, la iglesia no es ni zoom, ni Google Meet, ni ninguna de estas plataformas, ni la página de Facebook etc, la iglesia es congregarnos reunirnos los hermanos juntos, para como dice su palabra animarnos, exhortarnos, y aprender, Pablo le dice a Timoteo acerca de la iglesias:
“Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte, para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.” 1 Timoteo 3:14-15 RVR1960
En este pasaje el apóstol Pablo nos enseña que la iglesia es la casa de Dios, que la iglesia sostiene como una columna y defiende la verdad, en la iglesia se nos enseña la palabra de Dios, se nos enseña la sana doctrina y a través de esto aprendemos cuál es la voluntad de Dios para nuestras vidas.
Ahora bien algunos dirán pero qué futuro tiene entonces alguien que está en una iglesia con malas enseñanzas y que además lee pero no entiende la escritura porque está sesgado con la doctrina de su iglesia y aquí aparece lo más importante, este tercer punto es la razón por la que jesús le dijo a sus discípulos cuando estos le dijeron que no se fuera después de haber resucitado , les conviene que yo me vaya.
La obra de su Espíritu.
“Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.” S. Juan 16:7-8 RVR1960
“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.” S. Juan 16:13-15 RVR1960
Soy un testimonio de que realmente el Espíritu Santo de Dios hace la obra en nosotros, he contado en diferentes ocasiones, que crecí en una iglesia de mala doctrina, con malas enseñanzas, hice muchas cosas pensando que hacía lo correcto, pero siempre buscaba que el Espíritu Santo me guiara, y ha sido un largo camino pero he visto el cumplir de su promesa él me ha ido guiando a toda verdad.
“Me buscarán y me encontrarán, porque me buscarán de todo corazón.”
Jeremías 29:13 DHH94I
Y aún todavía sigo buscando de su espíritu porque creo que todavía sucederá que me doy cuenta qué hay cosas que hago mal pensado que hacía lo correcto, no vivo con temor de equivocarme, pues los tropiezos son inevitables, pero si vivo con temor de no escuchar su espíritu cuando me equivoco, vivo con temor de estar mal y no escuchar su voz, vivo con temor de apagar su espíritu en mí, y cuando hablo de apagarlo hablo de endurecer nuestro corazón hasta tal punto en que ignore por completo su voz, esa voz que me dice que estuvo mal lo que hice, esa voz que dice que no haga lo incorrecto, esa voz que me confronta, algunos prefieren apagar esa voz para no sentirse mal cuando hacen lo malo ante los ojos de Dios.
Sentirse mal no es algo agradable, pero no saben cuánto a mi me alegra sentirme mal por cosas que hago pues he entendido que es una de las maneras como el espíritu actúa en nosotros, y esto me ayuda para llevarme al arrepentimiento que es lo que Dios busca, sentirme mal por mi pecado es el primer paso, creer su palabra y cambiar es el siguiente paso, y por último perseverar, pero hay quienes no quieren cambiar y terminan no haciendo caso a la voz de su espíritu.
Se que aquel que niegue que su espíritu le ha hecho sentir mal al hacer lo malo está mintiendo, puede que ahora no sientas nada, pero se que la primera vez que lo hiciste su voz retumbó tu conciencia, y en ese momento debiste tomar una decisión si hacías caso a esa voz o simplemente la ignorabas.
Se que muchos creen que el actuar de su espíritu es temblar, es llorar, es caerse, en algunas iglesia creen que estar lleno del Espíritu Santo es caer al piso y llorar, o reír, o como algunas iglesias cuando el pastor se quita el saco, y hace que la gente se caiga, hoy en dia lamentablemente vemos de todo, bofetadas santas, empujones, bailes extraños, todo sin orden y entre mas gritos mas unción, cuando estas cosas ocurren se dice en esa iglesia el Espíritu Santo se manifiesta grandemente, no nos engañemos estar lleno del Espíritu Santo es ser convencido de pecado justicia y juicio, cuando esto ocurre manifestamos en nuestra conducta sus frutos:
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”
Gálatas 5:22-23 RVR1960
La gente va la iglesia, al final de la prédica sale adelante llora, se cae, luego se levanta y sale de la iglesia a ser el mismo de antes, nada paso en su interior, de eso no se trata, ni tampoco se trata de que venimos a la iglesia, escuchamos su mensaje claro, directo, y salimos de la iglesia y no pasa nada en nuestra vida, cada vez que escuchemos su palabra debemos estar tan sedientos de aprender, que lo que Dios nos diga transforme nuestra vida, cuando se camina con Cristo todos los días se aprende algo nuevo que hace que se refleje en nuestra manera de vivir.
“Mas el que fue sembrado en buena tierra, este es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.”
S. Mateo 13:23 RVR1960
“Entonces Samuel dijo: «Más le agrada al Señor que se le obedezca, y no que se le ofrezcan sacrificios y holocaustos; vale más obedecerlo y prestarle atención que ofrecerle sacrificios y grasa de carneros.” 1 Samuel 15:22 DHH94I