LA SANTIDAD – PARTE 3 NO CORRA LOS HOMBRES SI NO A DIOS

LA SANTIDAD PARTE 3   NO CORRA LOS HOMBRES SI NO A DIÓS

I.  INTRODUCCIÓN

 

En el estudio anterior vimos como la creación del día de reposo tuvo como propósito enseñarle al hombre la importancia de su relación con Dios, para que el hombre diera un giro, y entendiera qué el mucho trabajo y el mucho conseguir, no es lo que hará de su vida una buena vida, sino que lo que realmente necesita es una buena relación con Dios, a través de la cual va a obtener lo necesario para una vida espectacular según el diseño dado por Dios, y más importante aún para una eternidad gloriosa en su presencia.

 

El siguiente es salmo expresa la increíble bendición de aprender a confiar en Dios respecto de los asuntos materiales, y pienso que para aquel que no entiende la importante lección de descansar en Dios, le va a parecer que es un salmo que patrocina la pereza pues dice así:

 

Salmo 127.1–2 Si el Señor no construye la casa, de nada sirve que trabajen los constructores; si el Señor no protege la ciudad, de nada sirve que vigilen los centinelas.2          De nada sirve trabajar de sol a sol y comer un pan ganado con dolor, cuando Dios lo da a sus amigos mientras duermen.,

 

Pero ojo, no es que Dios no aprecie la disciplina, el esfuerzo, el trabajo inteligente o el deseo de cumplir con las obligaciones… Lo que Dios no aprueba es el afán del hombre, que lleva a vivir una vida lejos de los principios de Dios, que lo hunde en el pecado, y por supuesto le impide disfrutar del amor de Dios.

 

Para sacar al hombre de este pecado, Dios instituyó el día de reposo, que apareció por primera vez en el desierto, donde de forma milagrosa Dios sostenía al pueblo a través del maná, sin embargo en lugar de estar contentos con la provisión que Dios diariamente les daba, algunos insistieron en salir el día de reposo a conseguir más…

 

Por esta razón, y para mostrar lo serio del asunto de descansar en Dios respecto de nuestra provisión, Dios colocó el cumplimiento del día de reposo como algo de lo cual dependería la vida o la muerte.

 

Éxodo 31:15  Seis días se trabajará, mas el día séptimo es día de reposo* consagrado a Jehová; cualquiera que trabaje en el día de reposo,* ciertamente morirá.

 

En aquella época el incumplimiento del día de reposo traía la muerte fisica… Pero más grave que eso la escritura enseña que pasa cuando no descansamos en Dios respecto de la provisión material.

 

Esta falta de confianza y de descanso produce codicia o avaricia, y estos pecados traen muerte espiritual. Dice así:

 

Proverbios 1.18–19  Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas, Y a sus almas tienden lazo. 19Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, La cual quita la vida de sus poseedores.

 

Colosenses 3.5–6 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia,

 

La avaricia y la codicia son idolatría…  Y somos idólatras cuando en lugar de buscar al Dios verdadero buscamos a los ídolos. (Aunque nos engañemos buscando a los ídolos a través de Dios)

 

Por estas razónes, para comenzar, Dios quería que como mínimo el hombre le dedicara un día a la semana en el cual no trabajara. Pero por supuesto, esta orden podía hacer que los hombres no trabajaran, y podía lograr que religiosamente fueran cada día de reposo al templo… ¿Pero quien puede obligar al hombre para que en su corazón realmente anhelé tener intimidad con Dios para vivir en santidad?

 

Si en la actualidad la norma estuviera vigente, es decir si Dios castigara con la muerte a aquel que no dedicará un día a la semana a buscarlo: Si Dios castigará con la muerte al que no viene cada sábado o cada domingo a la reunión de la iglesia: ¿Como sería la asistencia?

 

Pues no hay duda qué aquel que a veces no viene porque está cansado, por cansado que estuviera vendría.  O aquel al que le plantean un negocio a esa ahora no se dejaría desviar, porque de qué les sirve concretar un negocio si al otro día pierde la vida. Y a aquel que lo invitan a un cumpleaños por supuesto iría después de las nueve para no morir, y aquel que no tiene dinero se vendría a pie, y si está lloviendo se mojaria, porque el mejor mojarse que morir… Los que han dejado de venir porque pueden ver por Internet también vendrían.

 

NOTA:  SI DESEA SEGUIR ESTUDIANDO ESTE TEMA, DESCARGUE EL ARCHIVO PDF Y PODRA ACCEDER AL DOCUMENTO COMPLETO

Share the Post:

Related Posts

Join Our Newsletter

Scroll al inicio

¿Sabías qué?

La iglesia es una entidad sin ánimo de lucro, por esta razón para funcionar dependemos primeramente de Dios, y de las ofrendas, donaciones o contribuciones que sus miembros, amigos o simpatizantes quieran hacer, lo cual, si Dios lo coloca en tu corazón puedes hacer a través de las siguientes opciones.

Estamos en spotify
Síguenos